Publicado en TLM
Ver: Miguel Jalôto y Ludovice/Jalôto con dos conciertos en el Festival Camino de Santiago
Delicadeza y fuerza lusa con la brillantez del clave
La iglesia de Santa María de Santa Cruz de la Serós acogió la tarde del pasado lunes un nuevo concierto del XXIX Festival Internacional en el Camino de Santiago que organiza la Diputación de Huesca.
Fue el turno de Miguel Jalôto con una selección de piezas para clave que sirvió “de importante tarjeta de visita”. Para el intérprete, la elección no fue fácil, pues Carlos Seixas dejó cerca de cien sonatas o Rodrigues Coelho publicó cerca de cincuenta piezas.
Miguel Jalôto desarrolló con pasión y maestría música escrita por compositores portugueses, pero también la de autores extranjeros que vivieron en Portugal, o simples obras que fueron allí interpretadas.
En una noche lluviosa, Jalôto obsequió al respetable con unas primeras piezas tomadas de los cancioneros lusos, recreando con viveza y brillo la libertad en su ejecución. Una magnífica puesta escena para una música que en muchos momentos ha sido más que ignorada.
En el rescate, Seixas fue el compositor más popular de los que sonaron. “En su mejor momento es delicado, tierno, nostálgico, pero también fogoso, muestra mucho del temperamento portugués”, apunta Jalôto, que también tocó temas de Scarlatti poniendo el acento en lo pedagógico, técnicamente sencillos pero musicalmente muy ricos y con similitudes estilísticas a otras grandes obras, “afín al caso de Bach”.
Coelho es “muy complejo, a veces un poco seco, pero eficaz y hasta muy expresivo en sus cuatro Susanas. Torrelhas es un desconocido, sus únicas piezas están en un manuscrito en Oporto, pero podría haber sido aragonés, y Olagué, navarro, trabajó en Burgos y Santiago, pero la música que de él sobrevivió se encuentra también en Oporto. Ambos muestran una transición entre el más estricto estilo renacentista ibérico, a uno más italobarroco, pero mezclando diferentes influencias y gustos”.
Baena también era español pero residía en Lisboa, donde imprimió la publicación de teclado ibérico más antigua que se conoce. “En este caso tomé su versión de un famoso motete de Escobar, compositor de Oporto que se hizo famoso trabajando para los Reyes Católicos. Estoy muy emocionado ya que este año el festival presta especial atención a nuestro país, aunque estamos muy conectados por el Camino y por otros rasgos históricos”, destaca Jalôto.